El aceite de coco extra virgen prensado al frio y decantado. Salud, belleza y alimento gourmet en un sólo producto. Apto para personas de todas las edades y exigencias: niños, adolescentes, adultos, adultos mayores, madres gestantes y recién nacidos, veganos, vegetarianos, celiacos deportistas, estudiantes, pacientes, etc. Consiste principalmente (>50%) de grasas de cadena mediana. Este tipo de grasa no se acumula en el cuerpo, moviliza y quema la grasa guardada, brinda saciedad evitando los antojos y aumenta el metabolismo (5 – 10%) ayudándote obtener tu peso ideal.

 

100% Natural: libre de transgénicos, químicos y pesticidas.
100% Peruano: hecho con coco gigante amazónico.
100% Sostenible: cultivo silvestre que respeta la naturaleza.

 

Por su alto contenido de Ácido Láurico es antibacterial, antimicrobiano, anti-fúngico, anti-parasitario y anti-viral. Es un poderoso aliado contra una amplia variedad de enfermedades modernas y degenerativas como la obesidad, Alzheimer, diabetes tipo 2, artritis, osteoporosis, cándida, parasitismo, enfermedades virales, gastrointestinales (indigestión, mejora la absorción, estreñimiento, gastritis), dermatológicas, etc. Ideal para la belleza aplicable en la piel, rostro, cabello, uñas y dientes. Se recomienda una dosis básica de 3 cucharadas al día; una antes cada plato principal.

 

Cerca de un 50 por ciento del contenido de grasa en el aceite de coco es Ácido Láurico, que rara vez se encuentra en la naturaleza. De hecho, el aceite de coco contiene más Ácido Láurico que cualquier otra sustancia en la tierra.

 

El aceite de coco ha sido un elemento básico de la alimentación y de la belleza desde hace milenios. Es poderoso destructor ya que tu cuerpo convierte el Ácido Láurico en monolaurina, un monoglicérido que puede destruir los virus cubiertos de lípidos como el VIH, el herpes, la influenza, el sarampión, las bacterias gram negativas y los protozoos como la Giardia lamblia; también le brinda a su cuerpo grasas de alta calidad que son críticas para una salud óptima.

 

Esto es, sin duda, parte de lo que hace al aceite de coco tan útil medicinalmente tanto cuando se toma internamente como cuando se aplica externamente.

 

El aceite de coco está compuesto de ácidos grasos de cadena media (MCFA’s por sus siglas en inglés) que se digieren y cruzan las membranas celulares fácilmente. Los MCFA’s se convierten inmediatamente en energía en el hígado en lugar de ser almacenados como grasa.

 

Esto es en parte por lo que se recomienda el aceite de coco como un remplazo ideal de los carbohidratos no vegetales.

 

El aceite de coco no cae pesado en su sistema digestivo y no produce aumento en el nivel de insulina en su torrente sanguíneo, así que si quiere un poco de energía extra, puede comer una cucharada de aceite de coco o bien, agregársela a sus alimentos.

 

Para poder añadir más aceite de coco en su alimentación, también puede agregárselo a su té o café en lugar de un endulzante. Esto también ayudará a mejorar la absorción de vitaminas solubles en grasa, por lo que tomar una cucharada de aceite de coco junto con sus vitaminas diarias podría ayudar a aumentar su efectividad.

 

La composición del aceite de coco:

 

Más del noventa por ciento de aceite de coco se compone de grasas saturadas ¡no se asuste! No es tan malo como parece, lea hasta el final de este análisis y puede cambiar su opinión, junto con rastros de algunos ácidos grasos no saturados, tales como ácido graso monoinsaturado y ácido graso poliinsaturado. El aceite de coco virgen no es diferente de esto.

 

  • Los ácidos grasos saturados: la mayoría de ellos son triglicéridos de cadena media, que se suponen asimilar bien en el sistema del cuerpo. El Ácido Láurico es el principal contribuyente, representando más del cuarenta por ciento del total, seguido por el Ácido Cáprico, Ácido Caprílico, Ácido Mirístico y Palmítico.
  • Los ácidos grasos poliinsaturados:Ácido Linoleico.
  • Los ácidos grasos monoinsaturados: Ácido Oleico.
  • Poli-fenoles: el coco contiene Ácido Gálico, que es también conocido como Ácido Fenólico. Los polifenoles son responsables de la fragancia y el sabor del aceite de coco y el aceite de coco virgen es rico en polifenoles.
  • Ciertos derivados del ácido graso como betaínas, etanolamida, etoxilados, ésteres grasos, polisorbatos grasos, monoglicéridos y poliol ésteres.
  • Cloruro de graso, sulfato del alcohol graso y sulfato éter de alcohol de graso, todos están derivados de los alcoholes grasos.
  • Vitamina E, vitamina K y minerales tales como el hierro.

 

El hecho es, no todas las grasas saturadas son creadas con igualdad.

 

La palabra clave aquí es “creado”, ya que algunas grasas saturadas son de origen natural, mientras que otras grasas son manipuladas artificialmente a un estado saturado a través de un proceso hecho por la mano del hombre llamado hidrogenación.

 

El proceso de hidrogenación manipula el aceite vegetal y de semillas mediante la adición de átomos de hidrogeno mientras se calienta el aceite, produciendo un aceite espeso y rancio que realmente solo beneficia la duración (vida útil) de los alimentos procesados y las ganancias corporativas.

 

Las comunidades médicas y científicas se han unido en la opinión de que los aceites vegetales e hidrogenados deberían ser evitados.

 

Estas grasas no saturadas, son artificialmente manipuladas en grasas saturadas, también conocidas como grasas trans, y sin duda ha escuchado hablar de ellas últimamente. Algunas ciudades y estados han prohibido su uso. Ya no existe controversia alguna sobre los peligros de salud de estas grasas artificialmente saturadas. Y, ¿qué cree? Estas son las mismas grasas trans dañadas que han sido promocionadas como “saludables” y “amigables con el corazón” en los últimos 60 años por el interés de las semillas y vegetales.

 

Pero la verdad finalmente salió a la luz. Las grasas trans fueron reprimidas, desacreditadas y reveladas como el enemigo de la buena salud que siempre han sido, sin importar lo que los cómplices de los aceites vegetales y de semillas le hayan dicho al público en el último medio siglo.

Por desgracia, esta difamación de grasas saturadas hidrogenadas ha creado mucha confusión referente a las grasas saturadas de origen natural, incluyendo el aceite de coco.

La verdad acerca del aceite de coco es obvia para cualquier persona que haya estudiado la salud de las personas que viven en culturas tropicales tradicionales, donde el coco ha sido un elemento básico en la alimentación nutritiva durante muchos años.

 

En los años 30’s, un dentista llamado Dr. Weston Price viajó por todo el Pacifico Sur, examinando las dietas tradicionales y su efecto sobre la salud dental y general. Descubrió que esas dietas ricas en productos de coco eran sanas y buenas, a pesar de la alta concentración de grasa en su alimentación, y las enfermedades cardiacas eran prácticamente inexistentes.

 

Del mismo modo, en 1981, investigadores estudiaron poblaciones de dos atolones de Polinesia. El coco fue la principal fuente de energía calórica en ambos grupos. Los resultados publicados en el Amercian Journal Of Clinical Nutrition, demostraron que las dos poblaciones presentaron una salud cardiovascular positiva.

 

De hecho, ¡no existe evidencia de que la ingesta de grasas saturadas de origen natural tenga cualquier tipo de efecto dañino en estas poblaciones!

 

Eso no es lo que usted esperaba, ¿verdad? Basado en 60 años de política pública negativa hacia las grasas saturadas de origen natural, usted pensaría que estas culturas deberían tener las arterias tapadas, obesidad o enfermedades del corazón.

 

Puede resultar sorprendente darse cuenta de que las grasas saturadas de origen natural del aceite de coco de hecho tienen en realidad sorprendentes beneficios para la salud, como:

 

  • Promueve la salud del corazón.
  • Promueve la pérdida de peso, cuando es necesario.
  • Ayuda a tener un sistema inmunológico saludable.
  • Ayuda a tener un metabolismo saludable.
  • Proporciona una fuente de energía inmediata.
  • Mantiene su piel con apariencia saludable y juvenil.
  • Apoya al buen funcionamiento de la glándula tiroides.

 

Pero ¿Cómo es todo esto posible? ¿Tiene el aceite de coco algunos ingredientes secretos que no son encontrados en otras grasas saturadas? La respuesta es un rotundo “si”.

 

El 50% del contenido de grasa en el aceite de coco es una grasa de cadena media difícil de encontrar llamada Ácido Láurico.

 

Los beneficios de los ácidos grasos de cadena mediana:

El aceite de coco tiene aproximadamente 2/3 de ácidos grasos de cadena mediana (AGCM), también llamados triglicéridos de cadena media o MCT. Estos tipos de ácidos grasos producen toda una serie de beneficios para la salud.

 

El aceite de coco es la fuente natural más rica de estos saludables AGCM.

 

Por el contrario, los aceites vegetales o de semillas más comunes se componen de ácidos grasos de cadena larga (AGCL) también conocidos como triglicéridos de cadena larga o LCT.

 

Estos ácidos grasos de cadena larga no son tan saludables para usted como los AGCM que se encuentran en el aceite de coco.

  • Los AGCL son difíciles de romper por su organismo – requieren enzimas especiales para su digestión.

 

  • Los AGCL ponen más presión sobre el páncreas, hígado y su sistema digestivo.

 

  • Los AGCL son en su mayoría, almacenados en su organismo como grasa.

 

  • Los AGCL pueden almacenarse en sus arterias en forma de lípidos como el colesterol.

 

  • A diferencia de los AGLC, los AGCM encontrados en el aceite de coco tienen muchos beneficios saludable, incluyendo las cualidades benéficas siguientes:

 

  • Los AGCM son más pequeños. Penetran las membranas celulares fácilmente y no requieren enzimas especiales para ser utilizadas con eficacia por su organismo.

 

  • Los AGCM son fáciles de digerir, ponen menos presión en su sistema digestivo.

 

  • Los AGCM son enviados directamente al hígado, donde rápidamente se convierten en energía en lugar de almacenarse como grasa.

 

  • AGCM pueden en realidad estimular el metabolismo de su cuerpo, haciéndolo bajar de peso.

 

Los beneficios del aceite de coco para la salud.

 

Cuidado del cabello: el aceite de coco es uno de los mejores nutrientes naturales para su cabello. Ayuda en crecer el pelo sano y le da a su cabello una calidad brillante. Es muy eficaz en reducir la pérdida de proteínas que le puede llevar a diferentes cualidades no atractivas o dañinas en su pelo.

 

Es un excelente acondicionador y ayuda al proceso de crecimiento de cabello dañado. También proporciona las proteínas esenciales necesarias para nutrir y sanar el cabello dañado. Un estudio indica que el aceite de coco ofrece una mejor protección al cabello contra el daño causado por la fatiga de hygral.

 

Puede asegurarse de que su cuero cabelludo está libre de la caspa si masajearía la cabeza con aceite de coco regularmente aun si su cuero cabelludo está crónicamente seco. También ayuda a proteger su cabello y cuero cabelludo libre de piojos y  huevos de piojos.

 

Por lo tanto el aceite de coco se utiliza como aceite de cuidado del cabello y se utiliza en la fabricación de diversos acondicionadores y cremas de alivio de la caspa. El aceite de coco normalmente se aplica tópicamente para el cuidado del cabello.

Las enfermedades del Corazón (Cardiopatía): hay una confusión extendida entre muchas personas que el aceite de coco no es bueno para el corazón. Esto es porque contiene una gran cantidad de grasas saturadas. En realidad, el aceite de coco es beneficioso para el corazón. Contiene alrededor de 50% Ácido Láurico, que ayuda a prevenir activamente varios problemas cardíacos como niveles altos de colesterol y presión alta.

Las grasas saturadas presentes en el aceite de coco no son dañinas como Ud. encuentra comúnmente en los aceites vegetales. El aceite de coco no  lleva a aumentar niveles de LDL, y reduce la incidencia de lesiones y daño a las arterias y por lo tanto ayuda a prevenir la arteriosclerosis.

 

El Cuidado de Piel: el aceite de coco es un excelente aceite del masaje para la piel también. Actúa como un humectante eficaz para todo tipo de piel, incluyendo piel seca. El beneficio del aceite de coco en la piel es comparable a la del aceite mineral. Afortunadamente, a diferencia de aceite mineral, es imposible tener efectos adversos secundarios sobre la piel si aplicamos el aceite de coco. Por lo tanto, el aceite de coco es una solución segura para prevenir la sequedad y descamación de la piel. También retrasa la aparición de arrugas y flacidez de la piel que normalmente acompañan el envejecimiento.

 

El aceite de coco también ayuda en el tratamiento de diversos problemas de piel como psoriasis, dermatitiseczema y otras infecciones de la piel. Por esa misma razón, el aceite de coco forma el ingrediente base de diversos productos para el cuidado corporal como jabones, lociones y cremas que se utilizan para el cuidado de la piel. Aceite de coco también ayuda a prevenir el envejecimiento prematuro y enfermedades degenerativas debido a sus propiedades antioxidantes conocidas.

 

Pérdida de peso: el aceite de coco es muy útil para pérdida de peso. Contiene ácidos grasos de cadena media y corta que ayudan en perder el peso excesivo. También es fácil de digerir y ayuda en el funcionamiento saludable de la tiroides y el sistema endocrino. Además, aumenta la tasa metabólica del cuerpo quitando la tensión en el páncreas, de esa manera quema más energía y ayuda a las personas obesas y con exceso de peso a perder peso. Por lo tanto, las personas que viven en las zonas costeras tropicales, quienes utilizan aceite de coco todos los días como su principal aceite de cocina, normalmente no son gordas, obesas o con sobrepeso.

 

Inmunidad: el aceite de coco también es bueno para el sistema inmunológico. Fortalece el sistema inmunológico porque contiene lípidos antimicrobianos, Ácido Láurico, Ácido Cáprico y Ácido Caprílico que tienen propiedades antibacterianas, anti fúngicas y antivirales.

 

El cuerpo humano convierte el Ácido Láurico en Monolaurin y la investigación ha apoyado como una forma efectiva de lidiar con los virus y las bacterias que causan enfermedades como la gripe, herpes, citomegalovirus e incluso VIH. El aceite de coco ayuda a luchar contra las bacterias dañinas como Listeria monocytogenes y Helicobacter pylori y perjudiciales protozoos como Giardia lamblia.

 

Digestión: las funciones internas del aceite de coco se ocurren principalmente debido a que se utiliza como aceite de cocina. El aceite de coco ayuda a mejorar el sistema digestivo y así previene varios problemas del estómago y relacionados con la digestión, incluyendo el síndrome de intestino irritable.

 

Las grasas saturadas presentes en el aceite de coco tienen propiedades antimicrobianas y ayudar a lidiar con diferentes bacterias, hongos y parásitos que pueden causar indigestión. El aceite de coco también facilita la absorción de otros nutrientes como vitaminas, minerales y aminoácidos.

 

Cándida: el aceite de coco ha sido mostrado para prevenir y hasta curar cándida. Proporciona el alivio de la inflamación causada por cándida, tanto externa como internamente. Su capacidad alta de retener la humedad no deja la piel de agrietar o pelarse. Además, a diferencia de otros tratamientos farmacéuticos para cándida, los efectos del aceite de coco es gradual y no es drástica o rápida, que le da al paciente una cantidad adecuada de tiempo para acostumbrarse a los síndrome de abstinencia o las reacciones de Herxheimer (el nombre dado a los síntomas que acompañan el rechazo de las toxinas del cuerpo generadas durante la eliminación de estos hongos).

 

Pero, en el tratamiento de esta condición, la gente debe aumentar sus dosis de aceite de coco gradualmente y al principio no debería empezar con una gran cantidad.

 

Cándida, también se conoce como Candidiasis sistémica, es una enfermedad trágica causada por crecimiento excesivo e incontrolado de levadura llamada Cándida albicans en el estómago. Esta levadura está más o menos presente en el estómago, pero no manifiesta adversos efectos ya que su crecimiento está controlado por las bacterias beneficiosas que también reside en nuestro estómago.

 

Hay muchas razones para este crecimiento incontrolado de la levadura. Por ejemplo, si otras bacterias destructivas o el uso de antibióticos que finalmente terminan en la eliminación de estas bacterias, puede ser un desequilibrio de bacterias y puede desarrollar un problema como Cándida. Además, blanquear o lavar el estómago con medicamentos o el uso excesivo de laxantes químicos o ingestión de material venenoso puede causar las levaduras u hongos que comienzan a crecer muy rápido y puede llevar a Cándida.

 

Curación e infecciones: cuando se aplica a las áreas afectadas, el aceite de coco forma una capa química que protege la parte del cuerpo infectada de virus, aire, hongos, bacterias y polvo. El aceite de coco es altamente efectivo en moratones porque acelera el proceso de cicatrización de los tejidos dañados.

 

Infecciones: el aceite de coco es muy eficaz contra una variedad de infecciones debido a sus propiedades antibacteriales, antivirales y anti hongos. Según el centro de investigación de coco (Coconut Research Center), el aceite de coco mata los virus que causan la gripe, el sarampión, hepatitis, herpes, SARS y otros riesgos graves para la salud. También mata las bacterias que causan las úlceras, infecciones de la garganta, infecciones del tracto urinario, neumonía y gonorrea.

 

Finalmente, el aceite de coco es también eficaz en la eliminación de hongos y levaduras que causan tiña, pie de atleta, candidiasis y dermatitis del pañal.

 

Otros: el aceite de coco se recomienda para numerosos otros beneficios que se explican a continuación. El uso del aceite de coco ha sido mostrado a ayudar suavemente a los siguientes:

 

  • Hígado:la presencia de cadena media triglicérido y ácido graso ayuda a prevenir enfermedades del hígado porque esas sustancias se convierten fácilmente en energía cuando llegan al hígado, así reduce el trabajo del hígado y también previene la acumulación de grasa.

 

  • Riñón:el aceite de coco facilita la prevención de las enfermedades del riñón y la vesícula También ayuda a disolver los cálculos renales.

 

  • Pancreatitis:el aceite de coco también se cree que es útil en el tratamiento de la pancreatitis.

 

  • Alivio de estrés:el aceite de coco es muy relajante y por lo tanto, ayuda a eliminar el estrés. Aplicar el aceite de coco en la cabeza, seguido de un masaje suave, ayuda a eliminar la fatiga mental.

 

  • Diabetes:el aceite de coco ayuda a controlar el azúcar en la sangre y mejora la secreción de insulina. También promueve la utilización eficaz de la glucosa en la sangre, así previene y trata la diabetes.

 

  • Huesos:como se ha mencionado antes, el aceite de coco mejora la capacidad del cuerpo para absorber minerales importantes. Estos incluyen el calcio y el magnesio que son necesarios para el desarrollo de los huesos. Así, el aceite de coco es muy útil para las mujeres que son propensas a la osteoporosis después de la mediana edad.

 

  • Cuidado dental:el calcio es un componente importante de los dientes. Puesto que el aceite de coco facilita la absorción de calcio por el cuerpo, ayuda en el desarrollo de los dientes fuertes. El aceite de coco también detiene la caries dental.

 

  • VIH y el cáncer:se cree que el aceite de coco juega un papel fundamental en la reducción de susceptibilidad viral de los pacientes de cáncer y VIH. La investigación preliminar ha mostrado una indicación de este efecto del aceite de coco en la reducción de la carga viral en los pacientes de VIH (Referencia).

 

Finalmente, el aceite de coco se utiliza a menudo por los atletas, fisicoculturistas y por aquellos que están a dieta. La razón detrás de este ser que el aceite de coco contiene menos calorías que otros aceites, su contenido graso se puede convertir fácilmente en energía y no conduce a la acumulación de grasa en las arterias y el corazón. El aceite de coco ayuda a aumentar energía y resistencia y generalmente aumenta el rendimiento de los atletas.

 

El aceite de coco puede remplazar docenas de productos de belleza y para el cuidado personal:

 

Desmaquillante: en una bola de algodón coloque un poco. Limpie con una bola de algodón limpia o una toalla húmeda.

 

Limpiador facial: coloque una gota de aceite de coco en la cara y cuello y masajee. Limpie con un paño húmedo y seque.

 

Exfoliante corporal: mezcle partes iguales de aceite de coco y caña de azúcar orgánica en una jarra de vidrio. Utilice el exfoliante en la piel seca antes de bañarse.

 

Exfóliate facial: en lugar de azúcar, mezcle el aceite de coco con bicarbonato de sodio o harina de avena con una pizca de canela, exfolie su cara suavemente.

 

Loción para afeitar: aplique una capa fina de aceite de coco en el área deseada y afeite como de costumbre. El Ácido Láurico en el aceite de coco también sirve como antiséptico para los cortes causador por afeitarse.

 

Crema para facial y corporal: puede utilizarlo solo o añadirlo a su aceite esencial favorito. (Asegúrese de utilizar un aceite esencial de alta calidad que sea seguro para la aplicación tópica). Cuando se aplica tópicamente, el aceite de coco ayuda a reducir la apariencia de líneas finas y arrugas, ayudando a mantener los tejidos conectivos fuertes y flexibles, y ayuda en la exfoliación de la capa externa de células muertas de la piel, haciendo que su piel más suave.

 

Crema para ojos: aplique una capa fina de aceite de coco alrededor de los ojos para suavizar las arrugas y contrarrestar el adelgazamiento y la piel flácida.

 

Crema para cutículas: simplemente frote una pequeña cantidad de aceite de coco alrededor de sus cutículas para suavizar las zonas secas.

 

Desodorante: aplicar una pequeña cantidad de aceite de coco directamente en sus axilas puede mantener los olores a raya, cortesía de las propiedades antibacterianas del aceite. Si prefiere, puede añadir un poco de bicarbonato de sodio o hacer un desodorante casero utilizando el aceite de coco, bicarbonato de sodio y polvo de raíz de flecha.

 

Baño hidratante: añadir aceite de coco a su bañera puede ayudar a hidratar la piel seca (Asegúrese de lavar bien la bañera después de utilizarla para evitar resbalones). Asegúrese de que el agua este por encima de los 76 grados Fahrenheit (24 grados Centígrados), de otra forma el aceite se convertirá en un sólido.

 

Jabón: el aceite de coco es uno de los ingredientes base de muchas recetas de jabón.

 

Protector labial: puede aplicar una pequeña cantidad de aceite de coco, o bien puede hacer su propio protector labial utilizando aceite de coco como ingrediente base.

 

Pasta Dental: mézclelo con bicarbonato de sodio, el aceite de coco puede remplazar su pasta de dientes común. El bicarbonato de sodio limpiará suavemente mientras que la acción antibacteriana del aceite de coco podría ayudar a mantener las bacterias dañinas a raya.

 

Repelente de insectos: mezclar aceite de coco con aceites esenciales de alta calidad podría ayudar a mantener las picaduras de insectos a raya cuando se aplica sobre la piel. Opciones efectivas incluyen: menta, bálsamo de limón, omero, aceite de árbol de té, neem.

 

Abrir el chat
¿Necesitas ayuda? ¡Envíanos un whatsapp!